Te has decidido a empeñar tu coche pero encuentras que hay dos tipos de empeño y no sabes muy bien por cuál decantarte. ¿Qué tipos de empeño de automóviles hay? ¿Cuál de las modalidades es la mejor?
En este post vamos a explicarte las dos formas en las que puedes empeñar tu vehículo y describir sus características para que puedas tomar la mejor decisión. En primer lugar, para decidir
qué tipo de empeño de coches es mejor, tenemos que valorar tres aspectos fundamentales:
tasación del automóvil y cuánto dinero vas a recibir en concepto de préstamo o crédito,
rapidez en la gestión del empeño y obtención del préstamo y
disponibilidad del coche para hacer uso de él.
Estos tres criterios son los más relevantes, ya que si vas a empeñar tu coche probablemente lo hagas motivado por una situación económica difícil o necesidad de liquidez inmediata. Por tanto, quieres ganar el máximo dinero posible en el menor tiempo. Pero claro, si tu coche es una herramienta de trabajo o lo necesitas para continuar con tu vida, debes evitar que empeñarlo para solventar un problema económico se convierta en otro mayor al dejar de disponer de él.
Hay dos tipos o modalidades de empeño de coches en España: con custodia y sin custodia.
- Empeño con custodia o dejando el coche en depósito. Esta es la modalidad de empeños clásica o estándar, en la que se deja el vehículo inmovilizado en el depósito de la casa de préstamos hasta que se devuelva el crédito. Algunas empresas aseguran ofrecer más dinero con esta modalidad, pero muchas veces no es cierto ya que cobran cargos adicionales por mantener el vehículo y la diferencia resultante es contraproducente para el cliente. También, la concesión del crédito o microcrédito suele demorarse un poco más ya que conlleva más tiempo gestionar el trámite. Pero la gran desventaja de este tipo de empeño de vehículos es que no podrás hacer uso del mismo ya que estará inmovilizado.
- Empeño sin custodia o manteniendo el vehículo para seguir usándolo. A diferencia del anterior, este tipo no funciona como el empeño tradicional en el que dejas un bien a custodia, sino que en todo momento mantienes el coche en tu posesión y puedes seguir conduciéndolo. El automóvil sigue siendo el aval o garantía del crédito o préstamo pero no debes dejarlo depositado. Esta es la principal ventaja del empeño sin custodia sobre el empeño con custodia. También suele ser más rápido, por lo que consigues el dinero de forma casi inmediata. Por ejemplo, nosotros, Crédito por tu coche, ofrecemos el capital en menos de 24 horas. Respecto al crédito, como en cualquier empeño, depende de la tasación del bien, pero recibes la cantidad limpia, sin tener que sustraer gastos de garaje o mantenimiento del vehículo por parte de la empresa.
Como ves, entre estas dos opciones,
recomendamos el empeño de coches sin custodia porque todo son ventajas: es más rápido, puedes ganar más dinero y en todo momento sigues usando tu coche. Por estas razones, nosotros trabajamos con el empeño sin custodia.